Especial USA: En el rodaje de 'Person of interest'

Es la serie más esperada de la CBS, canal que este año presenta una de las peores propuestas de la nueva temporada. Su gran aliciente es contar con el respaldo de dos siglas mágicas, las de J.J. Abrams. Aunque su plato fuerte no llegará hasta 2012 con el estreno en Fox de Alcatraz, Person of interest implica el regreso de uno de los actores más carismáticos de Perdidos: Michael Emerson.

El que fuera Benjamin Linus dará vida ahora a un multimillonario que ha desarrollado un software capaz de predecir futuros crímenes. Para darle utilidad al invento reclutará a un exagente de la CIA dado por muerto y que encarnará el mismísimo Jesucristo, Jim Caviezel (La pasión de Cristo). Desde luego, el argumento recuerda demasiado a Minority Report, de Steven Spielberg, pero esperamos que la trama tenga más miga de lo que anuncia la sinopsis oficial.
A finales de julio, dos meses antes de que se produzca el estreno oficial, el equipo de Person of interest seguía rodando escenas de exteriores en la sofocante ciudad de Nueva York. Es lo que tiene esta metrópolis. Vas turisteando por el Washington Square Park de Manhattan y te encuentras, de repente, rodeado de extras y en pleno rodaje de una escena. Sin esperarlo, se convirtió en una de las sorpresas más gozosas del viaje.

No descarto salir de extra en uno de los capítulos, porque nadie impidió que nos sentáramos en un banco del parque a contemplar cómo paseaban ante nuestras narices una gran cantidad de extras y el propio Caviezel. La experiencia sirvió para comprobar la cantidad de tiempo que se puede llegar a invertir para grabar una secuencia de segundos y lo terriblemente tedioso que puede llegar a ser el oficio de actor.

El despliegue de medios y de personal es inmenso (adjunto vídeo que, aunque insustancial, permite comprobar el volumen de extras que puede llegar a trabajar en una serie. Todas las personas que rodean a Caviezel, trajeado y móvil en mano, son ficticias). Las sillas de la foto demuestran que Michael Emerson también merodeaba por allí, pero no pudimos localizarlo. Acercarse a Caviezel tampoco fue posible. Los técnicos andaban histéricos impidiendo cualquier acercamiento. Aún así, las imágenes merecen la pena. Veremos si la serie consigue el mismo efecto.