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Mostrando entradas de abril, 2007

Dos maneras de integrar a los niños en el 'prime time'

La misma semana que Julia Otero cerraba temporada de su ‘No em ratllis’ en TV3, ‘Dolce vita’ se ha sacado de la manga un burdo plagio de una propuesta con la que solo tiene algo en común: la presencia de menores en el plató. Para aquellos que no la conozcan, la presentadora de origen gallego afincada en Catalunya lleva varias semanas emitiendo una propuesta de lo más interesante. Niños de todos los orígenes y estratos sociales inscritos en colegios públicos, concertados y privados catalanes opinan ante la cámara sobre temas de lo más adulto, como la monarquía, la vida en pareja o la homosexualidad. Mediante este ejercicio, con evidente peligro de banalización, han conseguido en este programa una radiografía espléndida de cómo suben hoy en día los más pequeños, corroborando precisamente que cada vez nacen más espabilados. A través de su mirada hemos podido comprender la huella que impregnamos los mayores en ellos y los valores que probablemente predominarán el día de mañana. El sentido

After the wedding, big drama

Tiene esta película de la realizadora danesa Susanne Bier, y nominada al Oscar como mejor filme de habla no inglesa, una interesante mezcla de denuncia social y de drama que la alejan en gran medida de un telefilme cualquiera, género al que perfectamente podría corresponder. La temática da para unas cuantas lágrimas, de hecho determinados clímax del filme invitan a sacar más de una vez el pañuelo, pero hay pequeñas peculiaridades, destacadas aportaciones, que hacen que Después de la boda no sea un melodrama al uso. La historia es dramática en sí misma. Jacob, interpretado por Mads Mikkelsen, mucho más conocido como el malo de Casino Royale por cuyas mejillas descendían lágrimas de sangre, lleva sus últimos años rescatando niños de la calle en un orfanato de la India. Cuando el dinero amenaza con agotarse, un multimillonario hombre de negocios llamado Jorgen lo invita a desplazarse a Copenhague para sopesar un posible donativo de 4 millones de dólares. Pero detrás de esa perita en dul

Diario de un culebrón sofisticado

Los argumentos basados en un contenido morboso, más propios de un reportaje de Gente o de una noticia del Daily Mirror , corren un gran peligro, y es que la trama termine derivando en algo banal y casi tan sensacionalista como el más amarillista de los tabloides. Que una profesora rebasando la cuarentena le practique una felación a su alumno de quince años es sin duda carne de cañón para todo cotilla que se precie, pero que encima, tras los huesos de la mujer madura se encuentre otra que bien podría ser su madre es ya todo un escándalo. Los culebrones se basan en premisas de este tipo para lograr adeptos y adictos. Del cine esperamos un poquito más. Diario de un escándalo , aunque lastrada por tan melodramático argumento, nos ofrece ese algo más. De entrada, una ácida introducción por parte de la veterana lésbica que ya quisieran para sí los guionistas de Pasión de gavilanes . Sus comentarios sobre la educación y el progreso resultan inteligentes y mordaces, por no hablar de las opini