Debían suponer la consagración de Lincoln como mejor película del año, la luz que marcara el camino de los académicos de Hollywood. Pero los Globos de Oro han preferido ir por libre y premiar a una de las menos favorecidas en las últimas quinielas. A pesar de que Argo partía con ventaja en los inicios de la contienda hacia la estatuilla dorada, la película de Ben Affleck estaba viendo como Spielberg y su retrato del ex presidente estadounidense le ganaban terreno. Hasta anoche. La asociación de la prensa extranjera ha decidido sumar así más confusión a una de las ediciones más impredecibles de los Oscar.
Pocas veces suelen coincidir ambos premios, pero el año pasado los Globos de Oro anticiparon de manera determinante el éxito de The artist. En esta ocasión, sin embargo, poco se puede aventurar. Tal como nos recuerdan los compañeros de PremiosOscar.net, Argo se convierte con el galardón de anoche en la película más premiada de la temporada, tan sólo igualada por La noche más oscura, de Kathryn Bigelow. Pero a este triángulo favorito conviene sumarle una cuarta contrincante en la sombra y que tras el Globo de oro a la mejor comedia o musical comienza a resonar con más fuerza, la espectacular Los miserables.
Argo y el musical de Tom Hooper fueron los triunfadores de la noche, pero incomprensiblemente ninguno de sus directores logró una nominación al Oscar el pasado jueves, algo de lo que sí pueden presumir Lincoln, Django desencadenado y El lado bueno de las cosas, la otra comedia en lidia. Así que este año los Globos de oro o bien se convierten en un premio de consolación para grandes derrotados o bien en predictores de la gala más sorprendente del Kodak Theatre desde que Crash le arrebató el premio gordo por sorpresa a Brokeback mountain.
Tampoco los Globos de oro resuelven muchas dudas en torno al apartado interpretativo. Si bien Daniel Day-Lewis se confirma como el favorito al Oscar por su reencarnación en Abraham Lincoln, le pisa los talones prácticamente en igualdad de condiciones el Jean Valjean de Hugh Jackman, también premiado como mejor actor en comedia o musical. Algo parecido le ocurre a Jennifer Lawrence, que a pesar de contar con el apoyo de la mayoría de apuestas, puede sentir el aliento de Jessica Chastain intentando darle alcance. Recordemos, eso sí, que ambas podrían darse de bruces con la veteranía de Emmanuelle Riva.
La sorpresa la encontramos en los galardones a mejor guión, que suman puntos al Django desencadenado de Tarantino con el premio al mejor texto original y que con el Globo al mejor guión adaptado otorga visibilidad a La vida de Pi, por ahora una de las menos consideradas para alzarse con el triunfo el próximo 24 de febrero. Pero visto el reparto de premios en esta temporada, resulta de lo más osado hablar de favoritos, a no ser que nos refiramos a Anne Hathaway, la única que hoy por hoy puede acudir a la gala con la seguridad del que se sabe vencedor.
En el apartado televisivo había menos espacio para la incertidumbre. Homeland afianza su éxito con el Globo a la mejor serie dramática y a sus dos protagonistas por su impecable segunda temporada y Girls hace lo propio como mejor ficción de comedia, desbancando a la favorita de los Emmy, la indestructible Modern family. Completa el palmarés con tres galardones la miniserie Game change, que sin Downton Abbey como rival y con la inexplicable ausencia de American Horror Story: Asylum se convierte así en la favorita indiscutible de la crítica.
Pocas veces suelen coincidir ambos premios, pero el año pasado los Globos de Oro anticiparon de manera determinante el éxito de The artist. En esta ocasión, sin embargo, poco se puede aventurar. Tal como nos recuerdan los compañeros de PremiosOscar.net, Argo se convierte con el galardón de anoche en la película más premiada de la temporada, tan sólo igualada por La noche más oscura, de Kathryn Bigelow. Pero a este triángulo favorito conviene sumarle una cuarta contrincante en la sombra y que tras el Globo de oro a la mejor comedia o musical comienza a resonar con más fuerza, la espectacular Los miserables.
Argo y el musical de Tom Hooper fueron los triunfadores de la noche, pero incomprensiblemente ninguno de sus directores logró una nominación al Oscar el pasado jueves, algo de lo que sí pueden presumir Lincoln, Django desencadenado y El lado bueno de las cosas, la otra comedia en lidia. Así que este año los Globos de oro o bien se convierten en un premio de consolación para grandes derrotados o bien en predictores de la gala más sorprendente del Kodak Theatre desde que Crash le arrebató el premio gordo por sorpresa a Brokeback mountain.
Tampoco los Globos de oro resuelven muchas dudas en torno al apartado interpretativo. Si bien Daniel Day-Lewis se confirma como el favorito al Oscar por su reencarnación en Abraham Lincoln, le pisa los talones prácticamente en igualdad de condiciones el Jean Valjean de Hugh Jackman, también premiado como mejor actor en comedia o musical. Algo parecido le ocurre a Jennifer Lawrence, que a pesar de contar con el apoyo de la mayoría de apuestas, puede sentir el aliento de Jessica Chastain intentando darle alcance. Recordemos, eso sí, que ambas podrían darse de bruces con la veteranía de Emmanuelle Riva.
La sorpresa la encontramos en los galardones a mejor guión, que suman puntos al Django desencadenado de Tarantino con el premio al mejor texto original y que con el Globo al mejor guión adaptado otorga visibilidad a La vida de Pi, por ahora una de las menos consideradas para alzarse con el triunfo el próximo 24 de febrero. Pero visto el reparto de premios en esta temporada, resulta de lo más osado hablar de favoritos, a no ser que nos refiramos a Anne Hathaway, la única que hoy por hoy puede acudir a la gala con la seguridad del que se sabe vencedor.
En el apartado televisivo había menos espacio para la incertidumbre. Homeland afianza su éxito con el Globo a la mejor serie dramática y a sus dos protagonistas por su impecable segunda temporada y Girls hace lo propio como mejor ficción de comedia, desbancando a la favorita de los Emmy, la indestructible Modern family. Completa el palmarés con tres galardones la miniserie Game change, que sin Downton Abbey como rival y con la inexplicable ausencia de American Horror Story: Asylum se convierte así en la favorita indiscutible de la crítica.
Comentarios
Pero el momentazo de JODIE FOSTER... ooohh eso fué.. su declaración pública... ya sabida. pero...y la cara que ponia Mel Gibson cuando lo estaba diciendo???.... ooohh.. era todo un cuadro de actores esa cara..... Yo es que a Jodie... desde años aahhh que vi su peli CONTACT.... es una peli que me encanta... la veo.. y la veo.. como las nikitas....jajaj.. ya tengo los dvds.. gastaos....
Qué lista de amigos, chiquilla? Yo sigo teniendo los mismos!!