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Fringe: El final del que no pudo presumir Lost

Era la oportunidad de oro de J.J. Abrams para enmendar el inmenso error que supuso el final de Perdidos, la última esperanza para los seguidores del maestro televisivo, que desde entonces no ha logrado reunir una legión tan entregada a su causa. El desenlace de Fringe, la única serie que hasta el momento ha logrado hacerle una mínima sombra a los supervivientes del vuelo Oceanic, era la ocasión perfecta para reconciliarse con sus fans. Y a tenor de este último episodio de la quinta temporada, el que nos despide para siempre de ese trío entrañable formado por Peter, Walter y Olivia, podemos decir que hay motivos para el optimismo. Abrams confirma que puede darle una salida digna a sus chaladuras, por mucho que le resbalen de las manos.

A nadie se le escapa que esta última temporada no pasará a la historia como una de las mejores de la serie que tan pacientemente ha mantenido en antena la cadena Fox. Tampoco la anterior, cuando los dos mundos alternativos convivían sobre un mismo túnel. Los seguidores de la serie hemos demostrado una paciencia y una entrega absolutas con los desvaríos temporales y argumentales de Fringe. Porque por encima de los viajes en el tiempo, de los saltos entre universos y otras tantas locuras que apenas ya se sostenían mediante explicaciones científicas, seguían subsistiendo tres protagonistas que nos robaron el corazón y sobre todo uno en concreto, Walter, que dentro de su demencia era el que aportaba mayor cordura a la serie.

Walter es precisamente el que ha protagonizado el momento más emotivo de esta finale, menos espectacular y más precipitada que aquel piloto que en su día fue el más caro de la historia. Lejos quedan aquellos presupuestos y aquellas tramas trepidantes. Desde aquel avión de pasajeros que se convirtió en el primer caso de la división Fringe hasta el capítulo de anoche parece que medie un abismo. Conscientes de ello, los guionistas han preferido tirar de la fibra sensible, apelar a los sentimientos de un espectador que se sabe entregado y que desde luego no iba a permanecer impasible ante ese "Te quiero papá" de Peter. Sólo por ese instante en el que el científico loco desaparece hacia el futuro con el niño anómalo de la mano han merecido la pena estos 100 capítulos, no siempre gratos, de travesía.

Fringe sorprendía en el capítulo 19 de su cuarta temporada con uno de esos episodios desconcertantes, un Letters of transit que nos introducía sin apenas aviso en la trama de su quinta y última temporada. Los observadores, que hasta el momento sólo suponían meros enigmas en segundo plano, pasaban a protagonizar el argumento de una historia futurista, postapocalíptica, en la que la humanidad queda a merced de unos seres tan inteligentes como insensibles. Hasta el año 2036 aguardan sumergidos en ámbar Peter, Olivia y Walter, para centrar sus últimos esfuerzos en librar a la tierra de su esclavitud.

Antes de la drástica invasión, Peter por fin resuelve su conflicto interior, después de haberse enamorado de hasta tres Olivias distintas, la de su mundo, la del universo al que luego descubrimos que él también pertenecía y a la que surgió de las dos realidades superpuestas, la que olvidó por completo su historia de amor con él. Superado el embrollo sentimental y ya de paso nuestro enorme desconcierto, la pareja se encuentra en el futuro cara a cara con su hija veinteañera, en un ejercicio argumental tan innovador como sórdido (Peter tenía más edad de cortejador que de padre). En todo caso, la relación paternofilial apenas logra la empatía del espectador, que incluso asiste con bastante indiferencia a la muerte de la joven.

De ahí que la escena en el parque que abría y cerraba esta última temporada y en la que por fin Peter puede abrazar a Etta, resulte menos emotiva que la última de la serie, cuando recibe esa carta de Walter con el tulipán blanco. La relación entre padre e hijo ha ganado finalmente más protagonismo en Fringe que la historia de amor entre los dos agentes. Sólo hay que echar un vistazo a estos últimos trece episodios para darnos cuenta de que Olivia Dunham ha pasado a un injusto segundo plano. Incluso hay capítulos en los que la eterna secundaria Astrid aparece más minutos que la propia protagonista.

La serie tampoco ha sido muy considerada con otros dos personajes imprescindibles. Nina Shark, en su momento la que más parecía conocer de todo el elenco, termina pegándose un tiro totalmente impotente en una silla de ruedas. Ella al menos logra intercambiar unas mínimas palabras con Peter y Olivia, algo de lo que apenas ha podido disfrutar el gran agente Broyles, reducido en esta temporada a un amasijo de arrugas sin apenas poder. Abrams se convierte así en todo un experto a la hora de crear personajes-humo, ambiguas personalidades que como ocurrió con Benjamin Linus o Richard Alpert en Perdidos apenas tienen luego repercusión en la trama. Hay formas de engañar al espectador muy poco gratificantes.

Pero a pesar de que la evolución de la serie no ha sido la más satisfactoria, Fringe será recordada siempre por sus excelentes tres primeras temporadas, cuando, quien lo iba a decir, resultaban más adictivos los casos procedimentales mezclados con las relaciones interpersonales de los protagonistas. Ahí está ese maravilloso capítulo en flashback llamado Peter en el que Walter abre una brecha entre universos para secuestrar a su hijo en el otro lado o el final de esa segunda temporada en la que nos descubren un nuevo mundo plagado de imaginativas curiosidades. Por todos esos detalles, como el que nos agradece a los fans todo el apoyo en este último capítulo, Fringe merece un puesto de honor entre las series más emblemáticas de la televisión.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
buena crítica.

Adios Fringe!!!

P: una menos, esta semana 2 menos tambien, una definitiva y otra la temporada.

jesn/larryjr
Anónimo ha dicho que…
lasha estaa invitada a mi fiesta de cumpleaños este sabado 26 de enero.

y Quest tambien!!!

40 tacos..
Anónimo ha dicho que…
JENS]]]] felicidadessss... se me ha pasado..aaiiinnnsssss..... y eso que lo sabia.. sabia que eras acuario.. y este año no se que tonteria me he hecho.. que estaba esperando haasta Febrero.... y eso que siempre me acuerdo de tu cumple.. por que es el tuyo el 26 de enero.. y el de NEW ]] el 25 de enero...... joeeerr... no sé como se me ha olvidado... ya la edad....jajajja....
ya sabia que hacias 40.. porque si el año pasado te felicité por los 39.... jajajja... eso por no estar en ningún foro.... ni nos hablamos casi...
pues yo sigo en Vertele... y hoy he estado hablando alli con Calvin]]]... os acordais de él??.. el que es ya forense... el galllego...jajaj..
Anónimo ha dicho que…
Y tuuu niño.... que tal por los Bilbaossss.... que estuviste el 23 y 24 no???... y ya casi que te toca venir a Madrid la semana que viene... vienes el 6 y el 7 de febrero no??
Anónimo ha dicho que…
Gracias LAsha!!!

Aun estas en vertele y Calvin esta por ahi tambien???

ES que casi no tengo tiempo de entrar en nada...

jesn

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