Amplia presencia este año de los mandamases de nuestra Academia de cine en la próxima edición de los Goya, que para más solera tendrá lugar en el Teatro Real de Madrid. Álex de la Iglesia, el presidente, ha logrado acaparar el máximo de nominaciones, quince en total, para su Balada triste de trompeta. Mientras que Icíar Bollaín, vicepresidenta primera, le sigue de cerca con las trece candidaturas de También la lluvia. Entre ambos compañeros, ahora rivales, se sitúa una cinta rodada en catalán por uno de los directores más extraños e infravalorados del cine español. Cuidadito con los bichos raros, porque Agustí Villaronga, de momento, ya ha dado la campanada con sus catorce nominaciones para Pa negre.
Es cierto que Balada triste de trompeta causó sensación en el último Festival de Venecia y que a nivel cuantitativo parte con ventaja en la carrera hacia los Goya. Tarantino le cedió con gusto a De la Iglesia el León de plata a mejor director, pero habría que preguntarse si no sería demasiado protagonismo para un solo hombre en la gran noche del cine español. Y más teniendo en cuenta los grandes rivales a los que se enfrenta en esta edición, una Icíar Bollaín que se come al bilbaíno con patatas tras las cámaras y un Villaronga clamando justicia. El cuarto contrincante, Rodrigo Cortés, ha sido relegado en todas las quinielas a una última posición que bien podría ser injustificada. ¿Por qué no premiar un experimento cinematográfico tan osado y bien resuelto como Buried?
En todo caso, para nuestro consuelo, han quedado fuera de la batalla hacia el premio gordo dos de las favoritas en todos los pronósticos, Biutiful y Lope. La primera tiene asegurado el más que merecido galardón para Javier Bardem y la segunda tendrá que conformarse con haber dejado en ridículo al caótico Alatriste de Díaz Yanes. Ya es suficiente mérito. Más cuestionable es la ausencia de cintas superiores a la balada de Álex, como Todo lo que tú quieras, Rabia o Amador, que no han logrado ni una sola mención. Imperdonable del todo, como nos recuerdan desde tiooscar.com, es el ninguneo hacia Héroes, una de las propuestas más frescas y entrañables de la última temporada.
Por su parte, Los ojos de Julia, la cinta española más taquillera del año, se lo juega todo a una única baza, la más resaltable de la película. Belén Rueda prueba suerte de nuevo en la categoría principal tras El orfanato y, sin duda, su salto cualitativo entre ambos filmes es destacable. Pero ahí están como grandes rivales Emma Suárez por La mosquitera, Elena Anaya por Habitación en Roma y, sobre todo, Nora Navas, Concha de Plata en el último Festival de San Sebastián por Pa negre.
Festivales y galardones aparte, conviene observar el cine español desde la óptica más realista, la que demuestran las cifras. Y desde luego 2010 no ha sido un año para tirar cohetes. Sólo tres películas han logrado sobrepasar los seis millones de euros de recaudación, la mencionada Los ojos de Julia y 3 metros sobre el cielo y Que se mueran los feos. Así que mientras nuestra industria se deshace en elogios hacia el cine de autor, el público prefiere inclinarse hacia productos de dudoso valor artístico. Echémosle la culpa a las descargas ilegales y así nos limpiamos las manos. ¡Nos vemos el próximo 13 de febrero!
Es cierto que Balada triste de trompeta causó sensación en el último Festival de Venecia y que a nivel cuantitativo parte con ventaja en la carrera hacia los Goya. Tarantino le cedió con gusto a De la Iglesia el León de plata a mejor director, pero habría que preguntarse si no sería demasiado protagonismo para un solo hombre en la gran noche del cine español. Y más teniendo en cuenta los grandes rivales a los que se enfrenta en esta edición, una Icíar Bollaín que se come al bilbaíno con patatas tras las cámaras y un Villaronga clamando justicia. El cuarto contrincante, Rodrigo Cortés, ha sido relegado en todas las quinielas a una última posición que bien podría ser injustificada. ¿Por qué no premiar un experimento cinematográfico tan osado y bien resuelto como Buried?
En todo caso, para nuestro consuelo, han quedado fuera de la batalla hacia el premio gordo dos de las favoritas en todos los pronósticos, Biutiful y Lope. La primera tiene asegurado el más que merecido galardón para Javier Bardem y la segunda tendrá que conformarse con haber dejado en ridículo al caótico Alatriste de Díaz Yanes. Ya es suficiente mérito. Más cuestionable es la ausencia de cintas superiores a la balada de Álex, como Todo lo que tú quieras, Rabia o Amador, que no han logrado ni una sola mención. Imperdonable del todo, como nos recuerdan desde tiooscar.com, es el ninguneo hacia Héroes, una de las propuestas más frescas y entrañables de la última temporada.
Por su parte, Los ojos de Julia, la cinta española más taquillera del año, se lo juega todo a una única baza, la más resaltable de la película. Belén Rueda prueba suerte de nuevo en la categoría principal tras El orfanato y, sin duda, su salto cualitativo entre ambos filmes es destacable. Pero ahí están como grandes rivales Emma Suárez por La mosquitera, Elena Anaya por Habitación en Roma y, sobre todo, Nora Navas, Concha de Plata en el último Festival de San Sebastián por Pa negre.
Festivales y galardones aparte, conviene observar el cine español desde la óptica más realista, la que demuestran las cifras. Y desde luego 2010 no ha sido un año para tirar cohetes. Sólo tres películas han logrado sobrepasar los seis millones de euros de recaudación, la mencionada Los ojos de Julia y 3 metros sobre el cielo y Que se mueran los feos. Así que mientras nuestra industria se deshace en elogios hacia el cine de autor, el público prefiere inclinarse hacia productos de dudoso valor artístico. Echémosle la culpa a las descargas ilegales y así nos limpiamos las manos. ¡Nos vemos el próximo 13 de febrero!
Comentarios
Pero bueno, para ser justos también tenemos que recodar que nada es gratis hoy en día... y el tema de los derechos adquiridos (como esto está mal regulado ahora tenemos derecho a ello) tampoco es así.
Yo creo que salvo sorpresa y la academia ultimamente lo ha hecho alguna vez También la lluvia se llevara los premios gordos y Balada triste arrasara en los técnicos.
Pan Negro puede dar la sorpresa, esta nominada a todas las categorías grandes salvo mejor actor y puede que arrase en las interpretativas, quien sabe sería la primera cinta en catalán en ganar el goya a la mejor pelicula.
Buried me temo que esta sin opciones, ha gustado bastante al publico y a la critica pero creo que la han colocado por publicidad
Finalmente indicar que me alegro un montón de las 4 nominaciones de Habitación en Roma, aunque me hubiese gustado que hubiese arañado alguna más como la de mejor pelicula.
Un saludo