A escasos días de su estreno en España, conviene hacerse la pregunta: ¿Conseguirá Fernando Meirelles recrear la sórdida atmósfera que plantea Saramago en Ensayo sobre la ceguera ? Sin duda, el reto era extremadamente complicado, y las primeras críticas apuntan hacia el estrepitoso fracaso, pero no olvidemos que el director brasileño ha contado con el beneplácito del premio Nobel de literatura que, al parecer, lloró de emoción tras el primer visionado de A ciegas . Desde luego, el planteamiento de la novela de Saramago es plenamente efectista a nivel visual. Las primeras páginas del libro, en las que personas anónimas pierden de repente la visión para entrar en una ceguera blanca son de lo más impactante . El lector puede hacerse fácilmente una idea de cómo trasladar al cine la acción de un conductor que se queda ciego frente a un semáforo y de bien seguro que Meirelles no defraudará en ese sentido. El problema llega después, cuando el gobierno decide recluir a los afectados por la pos...